
La mejor manera de empezar un proyecto nuevo, ya sea personal o del emprendimiento que tienes en mente, es definir una metodología de trabajo que te ayude a aclarar ideas y definir objetivos. El análisis CAME está dentro del proceso de investigación tan necesario cuando empiezas. En este artículo te explico cómo apuntalar tu principal habilidad y sacar el máximo rendimiento de ella.
Este artículo va ligado al que tienes disponible en el blog para trabajar tu DAFO. En él te hablé de cómo averiguar tus fortalezas, tus puntos de mejora (debilidades), detectar esas oportunidades que te rodean y también detectar las amenazas externas que pueden influir de manera negativa en ti. Te recomiendo leer el artículo qué es y cómo hacer un análisis DAFO personal antes de empezar a trabajar con tu análisis CAME.
Contenido importante
Qué es y cómo hacer un análisis CAME.
El análisis CAME es el encargado de analizar el resultado y pasar las conclusiones que sacaste en tu análisis DAFO a acciones concretas y reales.
Las siglas del análisis CAME significan Corregir, Afrontar, Mantener y explotar, o lo que es lo mismo, potenciar tus fortalezas, corregir tus puntos de mejora, protegerte de las amenazas y aprovechar oportunidades detectadas.
La filosofía del análisis CAME se fundamenta en tus habilidades, en tus fortalezas, en esas situaciones y características tuyas personales que hacen de ti una ventaja competitiva para realizar el propósito que tienes en mente. Es a partir de tus fortalezas que debes pivotar todo lo demás y ayudarte a establecer objetivos claros en cada uno de los puntos que verás a continuación.
Hecha esta aclaración, ¡ahora sí! Te presento punto por punto cómo puedes sacar el máximo partido al análisis CAME.
Potenciar fortalezas.
Recuerda que las fortalezas que anotaste en tu DAFO son todas aquellas cualidades, circunstancias, áreas de especialización y talentos que son estrictamente personales, que dependen exclusivamente de ti. Ahora en el CAME, la idea es que pienses cómo las puedes utilizar en tu beneficio, cómo sacas partido a tus fortalezas.
Una manera muy práctica de empezar es detectar cuál es tu principal cualidad, qué talento tuyo destacas sobre el resto, cuál de todos ellos destacas porque eres realmente bueno.
Una vez tengas detectada tu principal cualidad, anota cómo te puede beneficiar, cómo puedes sacar partido de ella. Si estás en la fase previa de análisis en una idea de negocio, ponla en contexto con esa idea, mira si es realmente una característica clave para llevarla a cabo. Por otro lado, si estás en el proceso de averiguar a qué te puedes dedicar, estás pensando a qué negocio te podrías empezar, anota todas esas ideas sobre negocios que compaginan con tu principal habilidad, aquellos que tu principal fortaleza es crucial.
Después de detectar tu principal ventaja, trabaja lo mismo con el resto de tus fortalezas, luego trata de imaginar como se complementan, cruza los resultados e imagina como compaginan, detecta el verdadero potencial de unir unos con otros.
Si tu caso es poner en perspectiva la idea de negocio que tienes en mente, este ejercicio te tiene que servir para empoderarte y ver de que eres capaz para empezar a trazar un plan y una estrategia clara para conseguir el objetivo que persigues.
A partir de analizar tus fortalezas, todo empieza a cobrar sentido, coges consciencia del qué, el cómo y sobre todo el por qué.
Corregir tus puntos de mejora, tus debilidades.
Con ayuda del DAFO, te diste cuenta de todas esas debilidades o puntos de mejora personales que deberías tomar acción y corregir.
Ahora en el análisis CAME te toca pensar qué acciones vas a hacer para corregir el efecto negativo que tienen sobre ti y sobre tu proyecto porque recuerda que los puntos de mejora dependen exclusivamente de ti. Te pongo un ejemplo.
Imagínate que uno de tus puntos de mejora que has detectado es la falta de tiempo. La filosofía del análisis CAME es planear acciones concretas para solucionar tu falta de tiempo. Piensa, ¿qué voy a hacer para corregir esta falta de tiempo?
Lo primero que haría yo es saber exactamente en qué ocupo mi día a día, ¿qué hace que esté tan ocupado para no dejarme espacio y llevar a cabo lo que tengo en mente? Por ejemplo, hacer el curso que quieres, empezar un negocio propio, prepararte para un triatlón, da igual, sea cual sea el sueño que tengas.
Una vez sabes perfectamente en qué ocupas tu rutina diaria, te toca pensar cómo dejas hueco en tu agenda para realizar la actividad que deseas. Puedes pensar que es imposible, pero te aseguro que sí lo es, siempre hay una solución, aunque no la puedas aplicar de la noche a la mañana, pero si realmente detectas que es tu principal debilidad, tienes que ser capaz de encontrar una solución y definir un plan para corregir la situación.
Un apunte personal, una de mis debilidades es la falta de tiempo para seguir con mi formación continua, escribir este blog y hacer deporte. Analizando mi situación personal, he detectado que si me levanto más pronto de lunes a viernes puedo escribir el blog y continuar con mi formación. Para hacer deporte he reservado una hora al medio día, de esta manera tengo tiempo para hacer la actividad física que me he propuesto.
Aprovechar oportunidades.
Ahora te toca analizar las oportunidades que has detectado en tu DAFO.
Te pongo en situación. Imagínate que tienes un negocio, ya sea como freelance o cualquier modelo diferente. Has detectado que una buena oportunidad son las subvenciones de la CEE para la transformación digital de las empresas. Pasar a la acción es informarte de qué trata exactamente y qué condiciones has de cumplir para beneficiarte de esta oportunidad.
De nuevo te digo, aprovecha el análisis CAME para tomar acciones concretas de las conclusiones que sacas en el DAFO. De esta manera pasas del concepto a algo concreto, si no eres capaz de ver cómo aprovechas esa oportunidad, bórrala, esa oportunidad no es para ti, céntrate en otra de tu DAFO. Si realmente es una oportunidad para ti, tienes que ser capaz de analizar cómo sacas partido de ella.
Mitigar amenazas.
Como vinos en el análisis DAFO, las amenazas son elementos externos que te afectan a ti, pero no puedes intervenir directamente para corregirlas. Te pongo un ejemplo, tú no puedes parar una guerra entre países, tampoco puedes poner freno a una crisis económica global.
Las amenazas que has detectado, es importante que te afecten a ti de una manera más o menos directa, piensa en que te afecta y toma acción para protegerte de ese impacto. Si no eres capaz de argumentar en que te afecta, ignórala y pasa a otra.
Un ejemplo de protegerte de una amenaza es, si detectas que se avecina una crisis económica importante, haz lo posible para no tener deudas, ponte las pilas para disponer de ahorros, empieza a suprimir gastos prescindibles…
Otro ejemplo más, imagínate que quieres montar una consultora de energías renovables, y una de las amenazas que has detectado es la crisis actual en las cadenas de producción que ponen en riesgo el suministro de placas solares o el precio de las mismas. Protegerte de esta amenaza que pone en riesgo tu modelo de negocio, sin dejar de lado tu actividad principal, es tomar acción y explorar otras vías de ingresos relacionados con tu actividad principal, pero que no dependen de los materiales.
Posibles soluciones que puedes descubrir es añadir ingresos a tu negocio impartiendo formación, hacer estudios de viabilidad, consultorías a empresas. Creatividad al poder, quizás esa amenaza la acabas convirtiendo en una oportunidad.
Tanto el análisis DAFO como el análisis CAME, si lo pones en contexto con el objetivo que tienes en mente, es mucho más efectivo el resultado que obtienes de él. Recuerda detectar tu principal cualidad y ponerla en contexto con el resto, de esta manera vas sumando una cantidad de talento muy importante que te sirve para definir la mejor estrategia que te acerque al éxito.